Resulta que el viejo mito popular de que beber agua adelgaza se ha demostrado científicamente, y sí, el consumo de agua antes de cada comida ayuda a perder peso. Un agente de control del apetito que no requiere receta médica, no tiene efectos secundarios, y no cuesta casi nada.
Un grupo científico, de la Sociedad Americana de Química, ha hecho público un ensayo clínico durante el Encuentro Nacional de la Sociedad Americana de Química (ACS en sus siglas en inglés) que demuestra que beber dos tazas de agua antes de comer ayuda a perder peso y combatir la obesidad.
El estudio empírico fue llevado a cabo en un ensayo aleatorio realizado con medio centenar de individuos adultos, durante un trimestre (12 semanas), y en él pudo demostrarse que las personas sometidas a una dieta, que beben 2 vasos de agua antes de las comidas, 3 veces al día, pierden 2,25 kilos más que quienes no lo hacen.
Según la responsable, Brenda Davy, investigadora de la universidad Virginia Tech (EE UU) y coautora del estudio, "La gente debería beber más agua y menos bebidas azucaradas; es una forma sencilla de controlar el peso".
Davy reconoce que hasta el momento la cultura popular defendía la importancia del agua para reducir algunos kilos de más. Pero había poca información científica que lo corroborara. Aunque también admite que el exceso en su consumo es peligroso, y que beber demasiada agua puede conducir a una enfermedad rara, pero grave, condición que se conoce como intoxicación por agua.
Las fuentes de agua en nuestra alimentación diaria son tres: los líquidos de las bebidas, el agua contenida en los alimentos ingeridos y el agua que se produce durante la metabolización de los hidratos de carbono, la grasa y las proteínas que consumimos.
El contenido en agua de los alimentos es muy variado, en este sentido los alimentos que más agua contienen son las hortalizas (hasta un 95%) seguidas de la frutas (hasta un 91%), el yogur (86%), el pescado blanco (82%) y, en quinta posición, los huevos (75%). También son ricos en agua los mariscos (79%), el pollo (67%), el jamón (67%) o el pescado azul (64%).
Por el contrario, aquellos alimentos que menos agua contienen son las galletas (2,5%), las legumbres (11%) y el arroz (11,4%).
Por tanto, ten en consideración estos datos y, si te vas a pasar con la comida de hoy, ¡bebe dos vasos de agua antes!.
Sin duda, más que adelgazar hace que no engordemos tanto. Es decir, que si estamos ya un poco llenas luego no tendremos tanta necesidad de comer tanta cantidad.
ResponderEliminarMientras mantengamos una dieta equilibrada y no nos dejemos nutrientes por el camino es un gran truquito. Yo procuro beber regularmente también :)
Muchas gracias por la información y que acabéis de pasar un buen día. Os sigo que no os conocía! :)
Andrea.
Gracias por tu comentario. ;)
Eliminar